Una escena de la ópera Turandot, de Giacomo Puccini, en el Gran Teatro del Liceu.
Con la producción de Núria Espert que marcó el regreso de la actividad al Liceu tras el incendio de 1994

‘Turandot’ regresa al Gran Teatre del Liceu con el patrocinio de la Fundación BBVA

El escenario del Gran Teatre del Liceu se viste de una China antigua y exótica con la llegada de Turandot de Puccini, que, bajo el patrocinio de la Fundación BBVA, ofrece 15 funciones hasta el 16 de diciembre. El Teatre recupera la producción de Núria Espert que inauguró la temporada 1999-2000 del actual Liceu, que volvió a abrir sus puertas tras el catastrófico incendio de 1994.

29 noviembre, 2023

Ópera

Turandot

La ópera se sitúa en la ciudad imperial de Pekín, donde la princesa Turandot protege su virginidad bajo un juramento: sólo podrá casarse con aquel hombre de sangre real que resuelva tres enigmas que ella misma dictará. Quien fracase morirá.

Alondra de la Parra y Diego García Rodríguez dirigen una colosal partitura que toma vida con el Coro y Orquesta del Gran Teatre del Liceu, el Coro Infantil del Orfeó Català y un reparto excepcional que cuenta con nombres destacados como los de Elena Pankratova, Ekaterina Semenchuk, Michael Fabiano, Martin Muehle, Vannina Santoni, Maria Agresta, Marta Mathéu, Adriana González, Siegfried Jerusalem, Raúl Giménez, Marko Mimica y Adam Palka, entre otros.

Puccini no pudo terminar el tercer acto de la partitura: moría en 1924 en Bruselas antes de poder terminar el dúo final, y fue su ayudante, Franco Alfano, quien la completó. La primera representación de la obra en el Teatro alla Scala de Milán en 1926 fue una especie de réquiem para Puccini. Arturo Toscanini dirigió la obra hasta las últimas notas dejadas por Puccini y después bajó la batuta diciendo: “Aquí termina la obra del maestro. Después de esto, murió”.

Esta producción fue la que inauguró la temporada 1999-2000 del actual Liceu, reconstruido tras el incendio de 1994. Debía ser Turandot porque era la ópera que estaba programada cuando el Teatre fue destruido por el fuego. La versión de Espert fue importante no solo por este motivo, sino por ofrecer una Turandot de aire clásico, enmarcada en una escenografía monumental que respiraba misterio y lejanía en cada detalle, y que recordaba las producciones colosales que llevaban el sello de directores de escena como Franco Zeffirelli.

Ahora se ofrece la producción de Núria Espert, pero revisada en profundidad por Bárbara Lluch, en la actualidad una de las directoras de escena más demandadas en el circuito operístico y teatral europeo. En colaboración con su abuela, y de forma consensuada, Lluch ha vuelto a esta Turandot icónica y ha revisado en profundidad algunos aspectos para, así, ir más al fondo del sentido de la ópera y conseguir que la propuesta vuelva a estar al día y sea relevante para el público de 2023, que, en muchos aspectos, es muy distinto al de hace 25 años.

Belleza, dramatismo y explosividad

Puccini soñaba con un ideal de belleza y dramatismo que nunca estuvo seguro de haber conseguido del todo, y la labor del equipo artístico consiste en descubrir los matices que ayudan a que Turandot avance hacia esta explosividad que el compositor deseaba para su ópera. La máxima responsable de llevar a cabo esta exploración será la directora musical principal de estas funciones, la mexicana Alondra de la Parra, una de las batutas más versátiles y afectivas que han empezado a ocupar los principales fosos del mundo recientemente. En las cuatro últimas funciones le sustituirá Diego García Rodríguez.

Liù es el papel más delicado de toda la ópera, el tipo de personaje que Puccini amaba y trataba con más cariño, en la línea de Mimì o Butterfly, y exige voces sedosas capaces de transmitir todos los matices de fragilidad del personaje. En estas funciones serán Maria Agresta, Marta Mathéu, Vannina Santoni y Adriana González las que asumirán su rol. Las dos Turandot de estas funciones también recaerán en cantantes expertas con la fuerza que exige ese papel para soprano dramática, como son Elena Pankratova y Ekaterina Semenchuk. El príncipe Calaf lo cantarán dos tenores spinto en su mejor momento, Michael Fabiano y Martin Muehle. El rey Timur se lo repartirán los bajos Marko Mimica y Adam Palka, y los papeles cómicos de los ministros Ping, Pang y Pong serán para Manel Esteve, Moisés Marín y Antoni Lliteres en todas sus funciones. Una particularidad de Turandot es que el papel secundario de Altoum, el emperador de China, está escrito para tenor, y normalmente recae en cantantes de larga carrera. En esta ocasión, lo cantarán dos mitos de la ópera mundial: el argentino Raúl Giménez y el alemán Siegfried Jerusalem, uno de los grandes intérpretes wagnerianos de finales del siglo XX, y que actualmente tiene 83 años.